Parece mentira que sobre el tema del canon haya debate social.
Total, porque una entidad privada, supuestamente sin ánimo de lucro, recaude 100 millones de euros al año por un impuesto indiscriminado sobre el global de la población, sin dar ni la más mínima explicación de cómo se recauda ni como se reparte, todo ello apoyado por el principio de “todos son culpables aunque se demuestre lo contrario”, no es para preocuparse.
Tampoco es preocupante que tengan el derecho a recaudar cantidades tan desproporcionadas como el 200% del precio de un DVD virgen, y eso ahora que “lo han bajado”. Suelen ellos decir que cobran cifras como el 1% o el 3%, pero la realidad es que yo compro los DVD’s vírgenes en Internet y pago por ellos 22 céntimos de euro, mientras que el canon que le corresponde tras la reforma de las tarifas es de 44 céntimos. Por una grabadora de CD’s/DVD’s cobran 6,6 €, que es (aprox.) un 33% del precio de esa misma grabadora sin canon. Si a todo esto le sumamos que no son las obras españolas lo que más se copian, ni de lejos, resulta que el canon se ve multiplicado por un muchísimos por ciento sobre lo que ya es abusivo.
Tampoco nos debe preocupar que nos hayan puesto el canon sobre aparatos que de ninguna manera deberían soportarlo, como por ejemplo los móviles, pen drives, escáneres o impresoras.
Los móviles y pen drives no son en absoluto soportes para almacenar música o películas. En tal caso pueden servir como transporte, nunca como soporte definitivo de almacenamiento, que es lo que decía la Ley (“soporte óptimo de almacenamiento”). A ver, hoy me apetece escuchar a los Rolling, eso debe estar en el Nokia 6110 blanco. Ridículo. Pero es que no son tontos y no lo hacen sin motivo, vais a ver porqué.
Unos pocos datos sobre lo de los móviles: van a cobrarnos 1,5 € por móvil. No parece mucho, ¿verdad? Si tenemos en cuenta que en España hay unos 45 millones de líneas de telefonía móvil, y si pensamos que cada usuario cambia de móvil cada menos de dos años de media (estos son datos reales), tendremos que la SGAE se lleva no menos de (45.000.000*1,5 €)/2 =33.750.000 €/año. Dado que la SGAE tiene unos 45.000 afiliados (creo), cada uno se lleva, de media, 750 € sólo de éste concepto. Pero claro, lo de que las cuentas son opacas es por algo. Dado que se supone que se reparte en función de las ventas de cada artista, tendremos a 500 o 1000 tíos metiéndose cantidades cercanas a 50.000 € de nuestros bolsillos. Ya no parece tan poco, ¿verdad?.
Por las impresoras también vamos a pagar. ¿Conocéis a alguien que copie libros en casa con su escáner y su impresora? Yo no. En tal caso se fotocopian, (las fotocopiadoras ya tienen su canon,) así que otra que nos cuelan de rondón.
Al comprar cualquier material audiovisual se tiene derecho a copia privada (va incluido en el precio y por tanto ya nos cobran por ello), y este derecho nos lo cercenan con medidas anticopia que vulneran nuestras leyes. Además, para implementar estas medidas se saltan a la torera los estándares de CD’s y DVD’s, por lo que en muchas ocasiones, y dependiendo del reproductor que tengamos, no funcionará el original comprado. Si vas a la tienda a que te devuelvan el dinero, te dirán que nasti de plasti, que los discos abiertos no los cambian. Esta es una buena razón para NO COMPRAR discos o DVD’s originales.
Justifican estos atropellos por la compensación de lo que ellos consideran “un robo”. En primer lugar, de ninguna manera se puede pensar que los discos pirateados se iban a vender todos, ni siquiera una pequeña parte. Por otro lado, también el gremio de los joyeros sufre constantes robos, generalmente atracos violentos y alunizajes que destrozan sus locales, y no por ello se nos cobra un canon por el uso de llaveros. Pero es que además se les ha olvidado el concepto de “presunción de inocencia”, que es la base del Derecho español.
Razones para piratear hay varias y una, desde luego, son los precios desorbitados que están poniendo a todo producto multimedia.¿Os parece razonable que películas de más de 50 años, como las del oeste, estén saliendo al mercado más caras que películas de actualidad? Son artículos cuya manufactura es baratísima, la película está completamente amortizada hace muuuchos años, y sin embargo nos quieren cobrar como si fuera una superproducción multimillonaria de este año. Eso sí, luego nos dicen que es por el bien del arte.
El otro día en la FNAC tenían un recopilatorio de Dylan de tres CD’s por 20 € (19,95 €, para ser exactos). Pues tenían el mismo recopilatorio en caja dura, con 10 reproducciones de carátulas de sus discos y un librillo de 24 páginas con fotos, ni siquiera las letras de las canciones del disco, POR 40 €. ¿Es ese el respeto que tienen por la obra del artista? Pues mira, entonces si le quito el estuche que traía el de 20 € me debería salir gratis, ¿no?
Otro buen motivo para piratear DVD’s es lo de la irritante carátula que ponen al principio de las películas y que ni siquiera te dejan saltar, de que la piratería es un delito y demás. ¿Soy el único al que le molestan? O sea, ¿que si me pillo el DVD original voy a tener que tragarme el sermón de turno cada vez que vea mi DVD?
Son más listos que un conejo: al cliente que compre mi producto le penalizo con una incomodidad, hala. Eso es ganarse a la gente. Pues me gusta más el funcionamiento de la copia pirata, oiga. Metes el disco, le das al Play y listo. La verdad es que hay que ser tonto para castigar a los que me pagan por el producto, mientras los que no pagan no tienen ese castigo.
Además, le añaden todo tipo de extras para hacer subir el precio artificialmente y que desde luego, a mí no me interesan lo más mínimo. ¿No ha habido sentencias europeas en contra de Microsoft por obligar a los consumidores a llevarse “un pack” de productos, haciendo que se lleve más de lo que se pretendía? Pues aquí debería ser lo mismo.
Pero quizá lo más ofensivo de este asunto son las prácticas mafiosas de la SGAE.
En alguna ocasión he leído como los abogados de esta entidad amenazan y demandan a propietarios de locales que tengan la osadía de organizar actuaciones en su negocio sin pagar a la SGAE, tanto si el grupo está afiliado como si no. Por eso, hay locales que, escarmentados, no contratan a grupillos que empiezan y por tanto no están “asociados”, por los problemas legales que tienen después.
También está el caso de los inspectores de la SGAE colándose en bodas para exigir el pago de sus cuotas, y que recientemente han sido condenados por ello.
O la denuncia que ganaron contra una pequeña Web en la que se había “insultado” a Ramoncín (como si esto fuera posible), y que sienta jurisprudencia por si a alguien se le ocurre salirse del pensamiento único.
Recientemente la SGAE ha sido denunciada por dos asociaciones vinculadas a la lucha contra el canon por financiar de forma irregular a los jueces (ver artículo). Según parece, la SGAE se ha erigido en la encargada de formar a los jueces en materia de propiedad intelectual. formación que incluye seminarios, hoteles, regalos,…, que van a parar a los bolsillos de los que luego han de actuar en juicios en los que se personan “los generosos regaladores”. ¿Será esto soborno? Es como si los promotores y constructores formasen a los jueces en materias como Corrupción y Urbanismo. La monda.
Quizá esta batalla la empezamos a perder cuando se les permitió cobrar por cualquier aparato música, de radio o TV instalado en un local público. ¿Por qué han de pagar por poner a disposición de su público algo que se está emitiendo para el público?
Quizá haya ya demasiados artistas para poder comer de ese trabajo. Pero mientras unos intentan cobrarnos al resto de ciudadanos “por si acaso”, hay otros que tienen todo el interés del mundo en dar a conocer su obra de manera gratuita (el llamado Copyleft) para de esta forma ingresar más en sus conciertos. ¿Con que derecho puede la SGAE negarles que repartan su trabajo gratis? Quizá lo que pasa es que el sector pide a gritos una reconversión, como han sufrido otros muchos sectores, pero no lo quieren ver. No me extraña que no quieran verlo: se les está permitiendo llevarse 100 millones de euros anuales, más lo que suba con el nuevo canon.
Los “artistas” quieren que se les coloque por encima del bien, del mal y del resto de la población española. En fin, yo soy informático, y de verdad que no entiendo porqué los “artistas” tienen derecho a canon y nosotros no. Bueno, y los arquitectos, por si miras a sus casas y luego las copias, deberían tener un canon por cada resma de papel o por cada ladrillo, y los fontaneros, por si miras a su instalación y luego “pirateas” su diseño un canon sobre la adquisición de cobre, aunque sea en forma de cable, o las putas su canon sobre los preservativos y sobre la adquisición de fundas de asientos traseros de automóviles, por si después de verlas decides follar con tu señora (o señor, por supuesto).
No creo que los “artistas” sean precisamente un sector desfavorecido de la sociedad, y por tanto no veo la más mínima necesidad de subvencionarles, y menos según las estructuras actuales. Estaría de acuerdo con iniciativas que favorezcan la formación de la gente que empieza, crear talleres en los barrios para enseñar música a los chavales y cosas similares. Estas subvenciones a la cultura deberían estar financiadas a través de mecanismos transparentes, sacado de nuestros impuestos. De esta forma también lo pagamos todos, pero existen mecanismos de control para evitar el fraude, pequeño detalle que el modelo actual ha olvidado incluir. ¿Tenemos la más mínima garantía de que se está repartiendo lo recaudado de forma legal?
Por último y haciendo uso de la misma prerrogativa que ellos disfrutan de suponer a todos culpables aunque se demuestre lo contrario, me encantaría entrar en los ordenadores de estos señores que dicen “que les roban” y ver que programas tienen y por cuales han pagado. A lo mejor nos acordábamos de que el término “pirata” se generó por el software, no por la música.
Y después del enorme chorizo que os he largado, estoy seguro de que me estoy dejando cosas en el tintero.
A todos los que hayáis leído hasta aquí, ¡¡muchas gracias por vuestra paciencia!!
P.D. Algunos argumentos de este artículo los habréis leído ya en otras entradas del blog, pero en mi opinión el tema de la reforma del canon merecía un comentario con todos estos aspectos detallados.